Viajar en avión es muy cómodo, pero existen problemas propios de los aeropuertos que es necesario aprender a solucionar para no acabar gastando mucho dinero en un desplazamiento que nos puede salir bastante más económico. Piensa en lo que gastas cuando viajas y cuánto de este gasto se produce antes de llegar a destino, solo en las instalaciones del aeropuerto cuando aparcas tu coche, facturas tu maleta y tomas un tentempié antes de subir al avión.
1- El problema del aparcamiento. Existen varios aparcamientos aeropuerto santiago. Por un lado, está el oficial, caro y con un servicio muy justo. Por otro, existen empresas privadas que te guardarán el coche y que si lo deseas te lo lavarán y desinfectarán y todo ello por menos dinero. Están situadas muy cerca del aeropuerto y solo tienes que realizar reserva, dejar el vehículo allí y ellos se encargan de llevarte al aeropuerto y de recogerte cuando vuelva el avión. Sin preocupaciones y sin estar pensando si tu coche está bien o le habrá pasado algo. No tendrás ni que recordar la plaza en la que lo has aparcado.
2- El problema de las colas. Esperar colas no es agradable para nadie, por eso siempre que puedas realiza la facturación online. Si no tienes que llevar maletas, esto te permitirá llegar con el tiempo justo al aeropuerto y sin problemas. No solo te ahorrarás las colas, sino que tendrás todos tus papeles arreglados y una mayor tranquilidad. Solo tendrás que pasar los correspondientes controles y disfrutar de tu viaje. Pero ¿sabías que hay compañías de mensajería que se encargan de enviar tu maleta para que no tengas que facturarla? Y en muchos casos, especialmente viajando dentro de España, resulta muchísimo más económico. Infórmate, evita las colas y ahorra mucho dinero enviando tu maleta directamente al hotel mediante mensajería.
3- Los precios de los bares. Circula por ahí un chiste en el que una persona se queja de que su pareja le prometió una cena en un sitio caro y acabaron en el bar de un aeropuerto. Pero lo cierto es que los precios en este tipo de locales son abusivos. Por eso, lleva siempre una bebida y algo de picar por si el vuelo se retrasa y toca darle algo al cuerpo. Así no te dejarás un dineral en una comida de mala calidad a precio de restaurante Michelín.