En la guerra de precios que algunas compañías telefónicas han iniciado para captar clientes, uno de los temas estrella que llevan como bandera es la velocidad de su ADSL o de su fibra. Sin embargo, ¿qué velocidad necesitas realmente para tus actividades diarias en Internet? Muchas veces nos obsesionamos con el número de Gigas y no pensamos en que nuestro ordenador tiene ya unos años y por mucha velocidad que le demos a la conexión, no va a aprovechar más de lo que ya aprovecha.

La velocidad adsl euskaltel, por ejemplo, es suficientemente alta para cualquier usuario. Ofrecen diferentes alternativas para casas en las que vive mucha gente e incluso para hogares en los que se trabaja online. También tienen ofertas para empresas. En definitiva, todo lo que puede hacer falta para trabajar a un buen ritmo, descargar todo lo que se necesita de la red y también subir los trabajos que puedan ser solicitados.

El router también es importante para aprovechar una buena conexión. Los que nos dejan las compañías de teléfono suelen ser suficientes, pero para los más exigentes no es mala idea comprar un router propio que ofrezca mejores prestaciones. Esto es algo habitual entre personas a las que les gusta jugar en línea y quieren sacar todo el partido a su conexión.

Y, como hemos dicho, el aparato desde el que te conectas también es importante. Si el ordenador es muy viejo o la Tablet tiene muy poca memoria RAM, ¿de qué vale tener una conexión excelente y un router de última generación? Todo tiene que ir en conjunto.

A todo esto se añade que la velocidad que prometen muchas compañías de teléfono son las máximas a las que se puede llegar, pero quizás en tu domicilio solo estés alcanzando la mitad de esa velocidad de conexión. Es algo que debes de tener claro antes de contratar, ¿cuánto va a llegar a tu hogar? ¿Qué vas a pagar realmente?

Por eso, no debemos de fijarnos solo en la oferta que hay en el papel, sino en todos los factores de la ecuación. Solo de esta manera sabremos qué es lo que pagamos realmente, lo que vamos a necesitar para aprovechar lo que pagamos y el partido que podremos quitar a nuestro ADSL. Además, también hay que valorar otros factores, como el servicio de atención al cliente de la compañía con la que vamos a trabajar.