Los menús del día están entre lo más solicitados en la hostelería. Los trabajadores que se ven obligados a comer fuera de casa buscan un lugar en el que poder comer de manera más o menos casera, a un buen precio y con varias opciones para poder tener variedad. También muchas personas acuden a comer el menú del día cuando no tienen ganas de cocinar o quieren darse un descanso.

Entre los aspectos más valorados del menú del día suele estar la variedad de platos y también el precio del menú. Y una de las cosas que más aprecian los clientes, sobre todo en los últimos años, es la posibilidad de solicitar medio menú, con un solo plato, por menos dinero. Y es que muchas veces, los menús del día son tan abundantes que el cliente que no es muy comedor se va con la sensación de haber pagado por muchas cosas que no ha tomado.

Pero ¿cuáles son los puntos débiles de estos menús? Uno de los más comentados por los clientes de bares de menú es el tema del postre. En la gran mayoría de locales se ofrece fruta, yogur y, como mucho, un helado o un postre lácteo. Pero nada más elaborado o que nos permita darnos un pequeño placer.

Y esto es algo fácilmente reparable consiguiendo un buen Proveedor de tartas congeladas para hosteleria que ofrezca variedad de tartas a un buen precio. De esta manera, se puede ofrecer la tarta del día a los clientes, variando cada día de la semana y dando así la posibilidad de que los comensales más golosos o con ganas de un caprichito se vayan mucho más satisfechos. Una pequeña ración de estas tartas, cuando se consiguen a buen precio, no es más cara que lo que se ofrece normalmente en el menú, pero seguro que tendrá mucho éxito.

Otro de los puntos débiles de los menús está el que hagan elegir entre el café y el postre. Realmente, cuando se pide el menú completo, esta elección no debería de darse teniendo en cuenta el bajo coste del café para el establecimiento y lo agradecidos que están los clientes cuando pueden consumir su postre y su café, consumiendo una comida completa y marchando totalmente satisfechos.

Por último, otra queja habitual está en el tamaño de las bebidas, ya que servir un refresco pequeño con un menú del día no solo resulta insuficiente, sino que además perjudica enormemente la impresión que se llevará el cliente.