-Una botella de vino. Es el regalo perfecto tanto si conoces bien a tus anfitriones como si es una cita de compromiso. Elige un vino selección rias baixas y tendrás el éxito asegurado. Es buena idea llevar una única botella pero de calidad, para que así los anfitriones puedan poner los vinos que tenían pensados para la comida y el tuyo sea un extra para degustar todos o para tener una segunda opción. También pueden guardarlo para otra ocasión si así lo consideran.

-Un postre casero. Si te gusta cocinar, un postre casero siempre será bien recibido y aunque ya haya otros, permitirá elegir a cada uno el que más le guste o probar un poquito de todos si se es goloso. La calidad de un buen postre casero siempre es sinónimo de éxito. Si la cocina no es lo tuyo, compra un dulce de calidad en una buena pastelería o encarga en tu panadería de confianza el producto que deseas.

-Plantas. Las plantas siempre son un regalo bien recibido, sobre todo si la persona que te invita cuenta con una bonita terraza o un balcón en el que colocarlas. Procura que no sea demasiado grande para que siempre tenga un espacio para ella y haz el regalo acompañado de una tarjeta con el nombre de la planta y sus cuidados básicos. Esto te lo pueden dar en muchas floristerías, pero también puedes hacerla tú buscando la información en Internet.

-Flores. Las flores nunca fallan. Un bonito ramo de flores es un regalo con clase y que siempre es bien recibido. Si van a ser muchas las personas invitadas a la comida corres el riesgo de que más gente tenga la misma idea, así que puedes optar por un centro de flores secas que se mantendrán bonitas mucho tiempo y que evitarán que pudieran encontrarse con demasiados ramos con los que no sabrá ni qué hacer.

-Un detalle para casa. En el caso de que la invitación a comer sea para enseñarte la casa, por ejemplo, porque es nueva o acaban de redecorarla o reformarla, un bonito detalle es llevar un regalo para el hogar. Pero procura que sea algo pequeño, de calidad y con un carácter neutro que encaje bien en diferentes lugares, a no ser que conozcas muy bien a la persona tengas la seguridad de que vas a acertar con el regalo.